Oda de amor al esmalte de uñas

 

Esmalte ¡oh querido esmalte! No sabes cuanta paz y relajación me traes, que cada vez que tomo un algodón con acetona siento mi corazón vibrar, pues el simple hecho de pensar que mis uñas quedaran adornadas con tu color me estremece.

Oh, colorido esmalte, cada que elijo un nuevo color, tiene un significado para mí: rojo para recordar los labios del ser amado, la sangre que mi madre derramó al parirme; verde: recordando las lindas plantas que mi abuela regaba cada día, el tono de mi uniforme de la escuela, donde viví maravillosos momentos; y azul, que me recuerda al cielo, porque cada ve que lo veo miro esperanza en un futuro mejor.

Querido esmalte, estás pegado a mis uñas y vives todo lo que yo vivo. Tú debes saber más de mí que yo misma, pues el color que elijo me delata, delata cualquier cosa de mí, y usted, señor barniz, sabe interpretarse más que nadie. Me has hecho más fuerte, ya no me rompo con tanta facilidad, los colores fuertes delatan mi carácter y los más débiles mis sentimientos.

He encontrado cierto placer en ese olor producido por tus tóxicos ingredientes. El del color rojo, en particular, me seda y trae calma, paz y demás. Pues cuando pinto mis uñas es mi momento de brillar, como lo haces tú cuando mi mano toca el sol de la tarde. Además, en una actividad que nos hace conectar con otras mujeres, que nos hace sentir en Ventaneando, pues muchas de mis amistades han sido descubiertas y reforzadas gracias a ti ¡querido esmalte de uñas!

Si no estuvieras yo ya hubiera muerto de sobredosis al intentar pintar mis uñas con un plumón permanente, cuyo aroma se diferencia notablemente del tuyo. No huele rico, y penetra mis fosas nasales de tal manera que me siento aprisionada e invadida. Pierdo mis sentidos y me sumo en un dolor grande de cabeza. Por ello, te amo tanto, tú no me haces daño, tú me haces mucho bien ¡te amo tanto esmalte de uñas! Por ello escribo esta oda hacia ti, porque te la mereces. Has mantenido la estabilidad emocional de muchas mujeres desde que fuiste creado, tu propósito principal fue traer paz al mundo ¡y lo has logrado! Sin embargo puedes hacer mucho más, pues el gelish te está robando tu puesto, ponte buso caperuzo querido esmalte ¡que no te saquen del trono!